Una frase en el portal de recycla.cl dice: "Si no pagas por reciclar hoy, nuestros hijos lo pagaran mañana" Almacenar pesados documentos en disco duros o CD está salvando a muchos árboles. Pero la computación y toda la parafernalia digital traspasaron a la humanidad otro problema ecológico: 40 millones de toneladas métricas de basura electrónica.
Con este volumen se podría llenar una fila de camiones que recorrería la mitad de circunferencia de la Tierra.
Según datos de la Agencia Europea del Medio Ambiente, el volumen de la e-basura está aumentando tres veces más rápido que los residuos urbanos.
En concreto, el volumen de la chatarra electrónica está creciendo entre un 16 y un 28% ¡cada cinco años!
Una chatarra incómoda
Y la situación empeora si se considera el uso de los recursos en el sector electrónico. Fabricar un PC con una pantalla plana de 17 pulgadas demanda 240 kg de combustible fósil, 22 kg de productos químicos y 1.500 litros de agua. Otro ejemplo: una planta de chips consume 7 millones de litros de agua cada día.
El gran inconveniente es que la e-basura pesa harto y ocupa mucho espacio. Cerca del 50% de ella son metales (ferrosos); el resto, plásticos y vidrios (no ferrosos). Por ejemplo, en 2005 los PC obsoletos de EE.UU. ocuparon 5,7 millones de m3, equivalente a una cancha de futbol, pero de 1,5 km de altura.
Se avanza en el reciclaje, parte de la solución. Pero el 90% de los equipos vetustos acaban en los vertederos después de haber sido lanzados a un contenedor o abandonados en la calle o depósitos de fierros.
Sólo reciclar los computadores que se amontonan hoy en los vertederos europeos llevaría unos 10 años.
Lo positivo de esto es la reutilización de los metales preciosos de la e -basura, como plata y oro. Sin embargo, la creciente demanda de otros metales convierten a estos en materiales de extremo valor.
Es el caso de indio, un derivado del zinc que se utiliza en más de 1.000 millones de productos cada año, desde pantallas planas a teléfonos celulares. En los últimos cinco años, los precios de este metal se han multiplicado por seis y en la actualidad es más caro que la plata.
Lo mismo sucede con el bismuto, utilizado en soldaduras para evitar el uso de plomo, que ha duplicado sus precios desde 2005, y el rutenio, empleado en resistencias y discos duros, cuyo valor se ha multiplicado por siete desde principios de 2006.
Lo negativo de reciclaje de la basura electrónica, por otra parte, es el contenido de metales pesados, compuestos tóxicos para el organismo humano.
La vía para frenar el crecimiento de la basura electrónica está en la iniciativa "Solucionar el problema de la e-basura (StEP, por sus siglas en inglés). Su sitio: www.step-initiative.org
Esta fue presentada la semana pasada por el Programa del Medio Ambiente de Naciones Unidas (PNUD), universidades de los cinco continentes y empresas como Dell, Microsoft, Hewlett Packard y Philips, entre muchas otras.
Será toda una carrera contra el tiempo. La iniciativa pretende estandarizar el reciclado de la e-basura en el mundo, extender la vida útil de los productos (quizás también rediseñarlos) y homogenizar las legislaciones.
Cada país tiene diferentes objetivos, medidas, mecanismos, incluso dentro de la Unión Europea, lo que en pocos años obligará a las empresas a enfrentarse casi con un centenar de leyes en todo el mundo.
En casa
En Chile se desechan 3 millones de celulares y 500 mil PC al año. Sin embargo, sólo se recicla el 1% de esta e-basura. Existen algunas empresas, como Recyla (www.recycla.cl), dedicadas a este rubro. Se suma, como caso destacado, una microempresa (www.reci cla.cl) que en el país realiza igual tarea.También hay instituciones, como el Comité para la Democratización de la Informática (www.cdchile.org) que invita a donar PC a entidades educacionales del país. Entretanto, en algunas municipalidades recogen y reutilizan los PC.
Fuente: El Mercurio